Las Hijas de la Caridad, comprometidas con la educación al alcance de todos.

Los centros educativos vicencianos de las Hijas de la Caridad garantizan el acceso a la educación de calidad, inclusiva y con oportunidades en todo el mundo.

Madrid, 24 de enero.

En el Día Internacional de la Educación, proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas recordamos  el papel que la educación desempeña en la paz y el desarrollo.

La Compañía de las Hijas de la Caridad, Titular de los Centros Educativos Vicencianos, desde sus orígenes en 1633, ha creído en la educación como herramienta privilegiada para el progreso de la sociedad.

Varios siglos después, los centros educativos de las Hijas de la Caridad siguen apostando por una educación de calidad para los más de 20 mil alumnos escolarizados en toda España, en casi 100 centros educativos ubicados en todo el territorio español. El carisma vicenciano ofrece una propuesta educativa innovadora, de calidad, integradora, inspirada en el Evangelio y comprometida con la sociedad, tal como lo intuyó San Vicente de Paúl

Santa Luisa de Marillac pidió permiso para abrir una escuela para niñas pobres que de otra manera se verían obligadas a mendigar o hallar otras formas de conseguir dinero. La educación, para nuestra fundadora, era una manera de ayudar a crecer sanos a los niños y jóvenes. Las Hermanas les enseñaban las habilidades que podrían usar para ganarse la vida y ayudar a las necesidades de su familia y educándolos, al mismo tiempo, en la fe católica y la enseñanza del catecismo.